Guía completa para conocer Recife, Brasil

¿Estás planificando un viaje a Recife, Brasil? La capital de Pernambuco, en la región Nordeste, es cuna de muchas de las mejores expresiones culturales que Brasil ha producido: música, danza, cine, artes plásticas y mucho más. También es un destino excelente para quienes disfrutan de gastronomía y el punto de partida ideal para explorar las bellísimas playas de la región.

Yo soy de acá, y como la mayoría de los recifenses, siento un enorme orgullo por mi tierra. Por eso, estoy muy contenta de venir a darte una ayudita práctica para disfrutar Recife, Brasil. En este artículo, te explico cómo llegar, cuándo venir, dónde hospedarse, qué hacer, qué comer y mucho más.

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Consejos para conocer Recife, Brasil

1. Cómo llegar

El Aeropuerto Internacional de Recife (que en realidad está en la ciudad vecina Jaboatão dos Guararapes) recibe vuelos directos desde varias ciudades de Brasil y del extranjero.

El aeropuerto está muy cerca de la playa de Boa Viagem, la principal playa urbana de la ciudad. Para ir desde allí hasta tu alojamiento, podés tomar el metro, aunque este medio solo cubre pocas zonas de la ciudad. Lo más común es usar autobús, taxi o Uber.

Si venís en auto, el principal acceso es la rodovía BR 101. Desde aquí, podés llegar fácilmente a otras capitales del noreste como João Pessoa (120 km), Natal (300 km) y Maceió (285 km).

También podés llegar en autobús, si ya estás en Brasil. La Terminal de Ómnibus de Recife (TIP - Terminal Interestadual de Passageiros) no está muy cerca de la zona hotelera ni de las principales atracciones de la ciudad, pero con un Uber o autobús todo se resuelve.

2. Cuándo ir a Recife, Brasil

Básicamente tenemos dos estaciones: mucha lluvia y poca lluvia. La temperatura no varía mucho a lo largo del año, aunque últimamente ha refrescado un poco en el “invierno” (según los estándares del noreste brasileño, o sea, entre 22 y 25 grados).

Por otro lado, al menos el verano no suele ser tan sofocante como el de Río de Janeiro, por ejemplo. Pero la humedad es altísima, así que el sudor está garantizado.

El período con más lluvias suele ir de mayo a agosto. Si querés evitar los aguaceros, lo más seguro es visitar Recife, Brasil entre octubre y marzo.

También vale muchísimo la pena planear tu viaje para coincidir con el carnaval, que tiene la fiesta callejera más grande del país. Pero si preferís evitar el pico de multitudes, podés disfrutar de los bloques precarnavalescos, que salen en los findes algunas semanas antes de la fiesta oficial.

3. Cuánto tiempo quedarse

Si tenés poco tiempo y solo querés conocer los principales puntos turísticos, dos o tres días alcanzan para tener un primer vistazo de Recife. Pero si querés descubrir lugares menos convencionales, viajar sin apuro y explorar los alrededores, te recomiendo quedarte más tiempo.

Si podés, hacé de cuenta que sos local — te prometo que vas a sentirte bienvenido. Hay muchas oportunidades para hacer voluntariado a cambio de hospedaje en Recife, lo que hace que tu viaje sea más económico y muchísimo más enriquecedor.

4. Dónde hospedarse

Como acabo de decir, mi consejo para conocer Recife como un local es hacer un intercambio de trabajo por hospedaje por Worldpackers, una plataforma de viajes colaborativos. 

Entre las opciones disponibles vas a encontrar principalmente hostales en Boa Viagem, donde está nuestra principal playa, y en la región central de la ciudad, y estas son mis zonas preferidas para alojamiento. 

Me parece interesante hospedarse en el barrio de Pina (en el extremo sur de Boa Viagem, más lejos del aeropuerto y más cerca del centro). Es una zona con muchos restaurantes, cerca de la playa y con fácil acceso al resto de la ciudad. Allí está el hostal Zilli, uno de los mejor valorados por los viajeros en Worldpackers, que ofrece una gran variedad de vacantes.

El Ramón HostelBar está más cerca del aeropuerto y más lejos del centro, pero también es una opción interesante donde alojarse como húesped o voluntario, porque tiene un bar muy animado en la planta baja, abierto al público.

También recomiendo hospedarte en la parte turística de Olinda, un municipio pegadito a la capital. Además de ser preciosa, esta zona es ideal para salir por la noche los fines de semana. ¡Y también hay opciones de voluntariado a cambio de alojamiento en Olinda!

Qué hacer en Recife, Brasil

Bueno, ¿y qué se puede hacer en Recife, Brasil? Como ya mencioné, los puntos turísticos más conocidos se pueden visitar tranquilamente en unos tres días, pero hay mucho más para hacer por acá. A continuación, te cuento sobre los lugares más famosos y algunos más alternativos.

Praia de Boa Viagem

Boa Viagem, la principal playa urbana de la ciudad, es uno de los lugares más famosos de Recife. Comparada con otras capitales del noreste de Brasil, su costa no es la más bonita, pero tiene su encanto. Hay quioscos, ciclovía, baños gratuitos y espacios para hacer deporte.

Desafortunadamente, el acceso al mar es limitado por la presencia de tiburones. Antes de enojarte con los animalitos, recordá que llegaron a esta zona como consecuencia de la acción humana, especialmente por la construcción del Puerto de Suape en un municipio cercano, que destruyó la zona donde los tiburones solían reproducirse.

"¿Pero para qué ir a la playa si no puedo nadar?", podrías preguntar. Igual podés tomar sol, salir a correr o caminar, tomar unas cervecitas o caipirinhas o —mi parte favorita— ¡comer!

Solo tenés que sentarte en cualquier parte de la playa, especialmente los fines de semana, y vas a ver pasar una procesión de vendedores ambulantes ofreciendo caldinho (pequeñas sopas muy ricas), huevos de codorniz, queso asado, maní cocido y asado, camarones y muchas otras delicias.

Los vendedores de playa prestan sillas y sombrillas sin costo, a cambio de que consumas algo (¡sin consumo mínimo!).

Otro lugar turístico por ahí es la Plaza de Boa Viagem, donde hay una feria de artesanía y comida típica. Boa Viagem también concentra muchos restaurantes y bares bastante buenos.

Recife Antigo

Mi parte favorita de la ciudad es Recife Antigo, región cuyo nombre oficial es Bairro do Recife. Está en el centro de la ciudad y es, como puedes imaginarlo por su nombre (Antiguo), la parte más antigua y preservada de la capital.

Durante la semana, está lleno de trabajadores del sector tecnológico y de la economía creativa, ya que allí se encuentra el polo tecnológico Porto Digital. El fin de semana, la gente va a disfrutar de los bares y restaurantes de la zona.

Los domingos, unaa ciclorruta de turismo y ocio pasa por ahí y conecta varios puntos de la ciudad. También hay una feria de artesanía en la bella calle Rua do Bom Jesus.

El corazón del barrio es la Plaza del Marco Zero, donde se hacen grandes eventos como los conciertos del carnaval de Recife. Justo frente a la plaza, del otro lado del brazo de río con mar, está el Parque de las Esculturas.

Este parque tiene obras del reconocido ceramista Francisco Brennand, siendo la más famosa una escultura fálica que es uno de los símbolos de la ciudad. Podés cruzar en barquito desde el Marco Zero con uno de los barqueros que trabajan allí.

Para conocer el Recife Antiguo puedes simplemente caminar por las calles adoquinadas y admirar los hermosos edificios antiguos. Además, el barrio alberga buenos cafés y restaurantes, así como varios espacios culturales, como la Sinagoga Kahal Zur Israel, el Museo Cais do Sertão, el Paço do Frevo, la Embajada de los Muñecos Gigantes y la Caixa Cultural.

Centro de Recife

Saliendo del Recife Antiguo y cruzando el puente, encontrarás los barrios de Santo Antônio y São José, parte del “centro” de Recife. Lamentablemente, las calles y edificios de esta zona no están bien cuidados como deberían.

Si quieres ver el día a día más “real” de la ciudad, vale la pena dar una vuelta por allí (recordando tener cuidado con tus pertenencias). En las calles de Santo Antônio encontrarás huellas de la presencia holandesa, portuguesa, francesa y judía expresadas en bonitos patios, casonas e iglesias.

El barrio también alberga el Palacio del Campo de las Princesas, que es la sede del gobierno de Pernambuco. En ciertos horarios específicos es posible hacer una visita guiada gratuita. En la misma plaza (Plaza de la República), también se encuentra el bellísimo Teatro Santa Isabel, que también se puede visitar.

São José, en cambio, es un barrio más comercial, con muchas calles estrechas, vendedores ambulantes y tiendas baratas. El gran destaque del barrio es el Mercado de São José, el primer edificio brasileño prefabricado en hierro. Además de ser un valioso patrimonio histórico, ofrece diversas piezas lindas en materiales como barro, madera y paja, así como varios tipos de alimentos.

Otro barrio importante en el centro de Recife es Boa Vista, donde se encuentra el cine de calle más antiguo de la ciudad (el Cine São Luiz, que aún funciona y es muy bonito por dentro), el Museo de Arte Moderna Aloísio Magalhães, bares “alternativos” muy populares entre la comunidad LGBTQIA+, y el Mercado de Boa Vista, un excelente lugar para disfrutar de un almuerzo regional.

Si te gustan las iglesias históricas, esta zona central también es muy buena opción. Una las más conocidas es la Madre de Deus, que está en el Recife Antiguo. En Santo Antônio encontrarás la Catedral de San Pedro de los Clérigos, en estilo barroco y rococó (ubicada en el Patio de San Pedro); la Basílica y Convento Nuestra Señora del Carmen, también barroca (en la Plaza del Carmen); y la Capilla Dorada, cerca de la Plaza de la República.

Paseo en catamarán

Otra forma interesante de conocer el centro de Recife es a través de los paseos en catamarán ofrecidos por la empresa Catamaran Tours. Tienen diferentes recorridos, pero la opción más conocida es el tour “Recife y sus puentes”, que recorre las tres islas del centro (Santo Antônio, Recife Antiguo y Boa Vista), pasando por debajo de cinco puentes (Puente 12 de Septiembre, Puente Maurício de Nassau, Puente Manuel Buarque de Macedo, Puente Princesa Isabel y Puente Duarte Coelho). Recomiendo elegir la salida cerca del atardecer.

Instituto Ricardo Brennand

El Instituto Ricardo Brennand no es de mis atracciones favoritas en Recife, porque no la considero representativa de la cultura local, pero a muchos turistas les encanta. El lugar no está cerca de los principales puntos turísticos, pero puedes tomar un táxi o Uber y combinar la visita con la Oficina de Francisco Brennand, de la que hablaré en el siguiente tópico.

En un entorno lleno de vegetación, encontrarás un gran castillo de estilo medieval que alberga pinturas al óleo y grabados de varios artistas, tapices, esculturas, mobiliario y una gran colección de armas blancas, incluidas espadas, dagas, cuchillos y armaduras.

Oficina Francisco Brennand

Sí, hay dos Brennand. Está Ricardo, que es el mecenas del Instituto del que hablé arriba, y Francisco, su primo. Este último es el famoso ceramista que mencioné antes al hablar del Recife Antiguo.

Encontrarás sus cerámicas en varias partes de la ciudad, desde el aeropuerto hasta las fachadas de algunos edificios del centro, pero también puedes ir a ver sus esculturas un tanto excéntricas (muchas con un toque erótico) en la hermosa Oficina Brennand, que está cerca del Instituto.

Otras atracciones en Recife, Brasil

Los paseos que mencioné anteriormente conforman, en líneas generales, el circuito turístico básico de Recife, pero te recomiendo incluir también otras actividades en tu itinerario.

Una sugerencia es combinar la visita a los Brennand con un paseo por el barrio de Casa Forte, uno de los más tradicionales de la ciudad, y visitar el Museo del Hombre del Nordeste y la Casa-Museo Gilberto Freyre, que están cerca.

Por ahí hay otro barrio que también merece una visita: Poço da Panela. Es casi un oasis en medio del caos urbano, con casas antiguas, calles tranquilas, aceras empedradas y buenos restaurantes.

Gastronomía y vida nocturna

En Recife encontrarás muchas opciones de restaurantes y bares con un menú repleto de delicias locales. Recomiendo pedir arrumadinho, escondidinho, macaxeira (yuca) con carne de sol o charque, sururu y casquinha de caranguejo (carne de cangrejo servida en su caparazón), pero hay muchísimas otras comidas típicas muy ricas. 

De postre, prueba la cartola (banana con queso, canela y azúcar), el bolo de rolo (pastel en espiral con relleno sabor guayaba que es típico de Recife) o el queso coalho asado con melaza de caña. Para beber, ¿qué te parece una caipiroska de acerola o un jugo de cajá, pitanga o guanábana?

¿Te cansaste de comer y quieres saber adónde ir para disfrutar la noche recifense? Mi mejor consejo es seguir el perfil @cabuetacultural en Instagram, que publica la agenda cultural y fiestera de la semana.

Qué conocer en los alrededores de Recife

La capital de Pernambuco ofrece muchas atracciones, pero si te quedas más tiempo, podrás explorar varios lugares hermosos en los alrededores. Algunos son perfectos para una excursión de un día, mientras que otros merecen al menos un fin de semana.

Empezando por Olinda, que está pegadita a Recife: no dejes de reservar un día para explorar sus calles. La ciudad es grande, pero la región turística es la “Ciudad Alta” o “Sitio Histórico”, Patrimonio Cultural de la Humanidad, ubicada en la entrada de la ciudad.

Por supuesto, no podía dejar de mencionar Porto de Galinhas, en el Litoral Sur de Pernambuco, elegida varias veces como la mejor playa de Brasil. El ecosistema allí ya está bastante saturado y no considero la mejor opción para quien busca tranquilidad, pero a pocos minutos de la playa principal de Porto encontrarás otras opciones más agradables. Muro Alto, Pontal do Cupe y Maracaípe definitivamente valen la visita.

¿Te animas a ir un poco más lejos? Ubicada a 110 km de Recife, la Playa de Carneiros también es considerada una de las más bonitas de Brasil. La vibra por allá es mucho más tranquila que en Porto, aunque la playa se ha vuelto cada vez más popular.

Otra región interesante es la del Cabo de Santo Agostinho, también en el Litoral Sur. A 50 km de Recife, por ejemplo, encontrarás la Playa de Calhetas, que es pequeña y está rodeada de grandes rocas redondeadas. Los fines de semana y feriados se llena bastante, pero durante la semana suele ser más tranquila.

En el Litoral Norte de Pernambuco, el destaque es la Isla de Itamaracá. Está a unos 70 km de Recife y es una excelente excursión de un día, con visita al Fuerte Orange y playa en la pequeña isla Coroa do Avião.

Pero los paseos alrededor de Recife no se limitan solo a las playas. Si tienes más tiempo, vale la pena conocer otros municipios del interior, como Garanhuns, Caruaru, el Valle del Catimbau, Triunfo y Bonito.

Espero que esta guía de Recife, Brasil, te haya sido útil, y que lo pases muy bien acá. ¡Mejor aún si haces un voluntariado por Worldpackers y tienes la oportunidad de vivir la ciudad como un local!