Conoce varias actividades ecológicas para disfrutar de la naturaleza con respeto
En este artículo te compartiremos varias ideas de actividades ecológicas que puedes comenzar a hacer hoy mismo, tanto en tu casa como en exteriores.
6min
En un mundo cada vez más digital y urbano, es fácil olvidar nuestra conexión con la naturaleza. Sin embargo, volver a acercarnos a ella puede ser crucial para nuestro bienestar físico y mental.
Las actividades ecológicas nos permiten disfrutar del aire libre, explorar nuevos lugares, alejarnos del ruido externo y apreciar la belleza de nuestro planeta que a menudo olvidamos.
Desde acciones del día a día como reciclar o tener tu propia huerta en casa, hasta actividades ecoturísticas como el senderismo o el avistamiento de aves, todo lo que veremos a continuación puede tener un gran impacto, tanto en lo personal como en lo que te rodea.
También te puede interesar: 10 acciones para cuidar el medio ambiente que puedes comenzar hoy mismo y Adopta una vida sostenible: Guía para tener mayor consciencia ambiental.
Actividades ecológicas para conectar con la naturaleza
Senderismo
Una de mis actividades favoritas para conectar con la naturaleza, es el senderismo.
El senderismo no solo nos brinda la oportunidad de hacer ejercicio al aire libre, sino que también nos permite descubrir paisajes y respirar aire puro. Además, es una actividad ecológica que puedes hacer con una mínima inversión inicial. Claro que si avanzas en el nivel de dificultad necesitarás más equipamiento, como bastones, una buena mochila y botas de trekking, pero para caminatas de baja exigencia no será necesario.
Estas actividades son ideales para disfrutar en familia o con amigos, y nos permiten desconectar del ajetreo diario mientras nos reconectamos con la naturaleza.
Puedes ver sitios como Alltrails, Wikiloc y Hikingproject para descubrir senderos cercanos a donde te encuentres.
Observación de aves
Otra actividad ecológica fascinante es la observación de aves. Con un par de prismáticos y una guía/app, podemos adentrarnos en el mundo de las aves y aprender sobre su comportamiento y hábitats.
La observación de aves nos enseña a apreciar la biodiversidad y a valorar la importancia de preservar los ecosistemas naturales.
Y lo mejor es que para practicarla no es necesario ir a un bosque o reserva ecológica, sino que mismo en tu ciudad podrás descubrir una gran variedad de aves que conviven contigo todos los días y quizás no tenías ni idea.
Una gran herramienta para la observación de aves es el sitio ebird.org y su app gratuita.
Acampada en la naturaleza
Acampar en la naturaleza te permite desconectar de la tecnología y experimentar la simplicidad de la vida al aire libre. Sin embargo, es crucial hacerlo de manera responsable, minimizando nuestro impacto en el entorno.
Algunas prácticas de acampada sostenible incluyen solo hacer fuego en lugares designados para esto, utilizar equipos ecológicos y practicar el principio de "no dejar rastro". Esto significa llevarnos toda nuestra basura, respetar la flora y la fauna, y dejar el lugar como lo encontramos. De esta manera, podemos disfrutar de la naturaleza sin comprometer su equilibrio.
La acampada es una práctica que se suele combinar con el senderismo en parques naturales, haciendo recorridos que pueden durar varios días.
Paseos en bicicleta
Los paseos en bicicleta son otra forma estupenda de explorar la naturaleza mientras hacemos ejercicio.
Ya sea en el campo o en la ciudad, andar en bicicleta con frecuencia nos ayuda a llevar un estilo de vida saludable. Además, es un medio de transporte ecológico que no genera emisiones contaminantes.
Muchas ciudades cuentan con carriles bici y senderos especialmente diseñados para ciclistas, lo que hace que esta actividad sea más accesible y segura.
Jardinería ecológica
Cultivar nuestras propias frutas, verduras y hierbas nos enseña sobre los ciclos de la vida y nos brinda la satisfacción de cosechar alimentos frescos y saludables.
Y no, para hacerlo no necesitas vivir en una casa ecológica con un gran jardín, ni en el medio del campo, puedes tener hierbas y aromáticas en macetas incluso si vives en un pequeño departamento.
A mayor escala, la agricultura orgánica implica el uso de técnicas sostenibles, como el compostaje, el riego eficiente y el control biológico de plagas. Al evitar el uso de pesticidas y fertilizantes químicos, estamos contribuyendo a la salud del suelo y a la biodiversidad de nuestro entorno. Muchas de estas técnicas puedes aplicarlas a tu huerta casera.
Voluntariados ecológicos
Una fantástica forma de estar en contacto con la naturaleza poniendo manos en la tierra, es participando de voluntariados en los que colabores con proyectos ecológicos.
En todo el mundo hay una gran cantidad de proyectos y emprendimientos locales relacionados a la naturaleza que buscan voluntarios que quieran dar una mano. Por tu ayuda de algunas horas al día, recibirás a cambio alojamiento en el lugar y otros beneficios, como pueden ser comidas y la posibilidad de participar en actividades y talleres que se realicen.
Esto te permitirá aprender muchísimo sobre permacultura, bioconstrucción, desarrollo sustentable, e incluso turismo sostenible, dependiendo del voluntariado en el que participes.
¿Cómo puedes postular? En la plataforma Worldpackers encontrarás muchísimas vacantes de voluntariados ecológicos en más de 140 países.
Actividades ecológicas para llevar una vida más sostenible
Llevar una vida más sostenible no solo beneficia al medio ambiente, sino que también puede mejorar nuestra calidad de vida. Pequeños cambios en nuestros hábitos diarios pueden tener un gran impacto a largo plazo. A continuación, te comparto algunas maneras prácticas de adoptar un estilo de vida más respetuoso con el planeta:
Reduce el consumo de plástico
Uno de los mayores desafíos ambientales que enfrentamos hoy en día es la contaminación por plástico. Reducir nuestro consumo de este material es esencial para cuidar el medio ambiente. Algunas formas de hacerlo incluyen:
- Llevar bolsas reutilizables al hacer las compras.
- Utilizar botellas y tazas reutilizables en lugar de desechables.
- Evitar productos con exceso de embalaje plástico.
- Optar por alternativas biodegradables o compostables.
Ahorra energía en el hogar
Otra forma de llevar una vida más sostenible es siendo conscientes de nuestro consumo energético en el hogar. No solo aportarás tu granito de arena a un cambio mayor, sino que también te beneficiarás cada vez que llegue la factura de energía.
Algunas medidas sencillas que podemos tomar, incluyen:
- Apagar las luces y desenchufar los aparatos electrónicos cuando no estén en uso.
- Utilizar bombillas de bajo consumo o LED.
- Regular adecuadamente la temperatura del hogar.
- Optar por electrodomésticos de alta eficiencia energética.
Compra productos locales y de temporada
La forma en que nos alimentamos también tiene un impacto significativo en el medio ambiente. Optar por productos locales y de temporada es una manera de reducir la huella de carbono asociada al transporte de alimentos. Además, los productos locales suelen ser más frescos y nutritivos.
Una forma de apoyar a los productores locales es visitar los mercados de agricultores y comprar productos orgánicos.
Además, como vimos antes, tener tu propia huerta en casa también te aportará un cambio muy beneficioso para tu salud.
Reutiliza y recicla
Reutilizar y reciclar son dos pilares fundamentales de un estilo de vida sostenible. Antes de desechar algo, siempre debemos preguntarnos si podemos darle una segunda vida. Algunas ideas incluyen:
- Donar ropa y objetos en buen estado a organizaciones benéficas o personas que le darán un mejor uso que tu.
- Reparar electrodomésticos y muebles en lugar de reemplazarlos.
- Utilizar envases reutilizables para almacenar alimentos.
- Separar adecuadamente los residuos para su reciclaje.
Usa transporte sostenible
El transporte es uno de los principales contribuyentes a las emisiones de gases de efecto invernadero. Optar por medios de transporte sostenibles es una forma efectiva de reducir nuestra huella de carbono. Algunas opciones incluyen:
- Caminar o andar en bicicleta para trayectos cortos.
- Utilizar el transporte público siempre que sea posible.
- Compartir el automóvil con otras personas.
Personalmente, he optado por utilizar la bicicleta como mi principal medio de transporte en la ciudad. No solo me mantiene en forma, sino que también me permite evitar los atascos de tráfico y reducir mi impacto ambiental.
Participa de proyectos sustentables
Anteriormente te conté sobre los voluntariados ecológicos, y traigo nuevamente el tema ya que la mejor manera de aprender es con la acción.
¿Sabías que puedes participar de proyectos de permacultura, vivir en eco aldeas, en reservas ecológicas, o en comunidades sostenibles de manera gratuita? Es decir, a cambio por colaborar con sus actividades diarias.
Esto también puede ser un excelente plan para viajar de manera económica por el mundo, ya que puedes hacerlo sin gastar en alojamiento. Además, conocerás a muchísima gente con intereses similares a los tuyos y desarrollarás nuevas habilidades que podrás aplicar a tu vida cotidiana.
Llevar una vida más sostenible no se trata de cambios drásticos, sino de pequeñas acciones diarias que suman. Al ser conscientes de nuestro impacto en el medio ambiente y tomar decisiones informadas, podemos marcar una diferencia positiva en el planeta y en nuestra propia calidad de vida.
¿Te gustan estas ideas para aprender y poner en práctica las actividades ecológicas? Crea un perfil gratuito en la comunidad de Worldpackers y empieza a guardar tus vacantes de voluntariado favoritas.